De pesca en El Cuitzillo, Michoacán municipio de Carácuaro.

Las vacaciones del verano pasado estuve en el rancho visitando amigos y familiares en El Nieto, una ranchería perteneciente a Carácuaro, teniendo el día libre un fin de semana me dispuse a ir de pesca y a falta de ríos (se carece mucho de agua en cuaresma) optamos por ir a una presa habiendo dos opciones ya que la presa local no tenía mojarras así que decidimos entre la presa de El Cirián y la presa de El Cuitzillo siendo esta última la mejor elección debido a la relativa cercanía existente. Cabe darles del dato de que las presas son pequeñas y las gestionan los propios dueños de los ranchos para darle agua al ganado en tiempo de sequías y para sacarle el máximo provecho llegan proyectos acuícolas de las dependencias competentes como la introducción de crías de mojarra tilapia cuyo tiempo de crecimiento va de los cinco a los seis meses.

Preparamos los carretes de "cuerdas" y los anzuelos pero el problema principal que no me convenció por cierto fue la carnada, como estoy acostumbrado a pescar con lombriz negra sacada de los "bajiales" y en esas regiones ni como conseguirlas, tuvimos que excavar bajo la humedad de los árboles encontrando solo lombrices "güeras" que a mi gusto no funcionan como carnada, en palabras calentanas las mojarras no "pican" con este tipo de anélidos. Aún así conseguí tortillas como alternativa, también pensé en el jabón "zote" que según me cuentan se hacen "bolitas" y se insertan al anzuelo pero ni la tortilla ni el jabón me funcionó y no me quedó opción mas que con las lombrices que recolectamos. 

Partimos de El Nieto por la mañana en motos, un transporte muy utilizado debido a la facilidad de navegar por las carreteras de terracería con díficil acceso. Al llegar encontramos unos paisanos del rancho pescando con una "atarraya" lo cual me desilusionó al pensar en el trabajo que me daría pescar con cuerdas pero bueno lo importante era pasar un momento de distracción y entretenimiento al lado de mis amigos y primos. Los resultados no fueron buenos, tardaban para "picar" y las pocas que se tragaban el anzuelo eran de tamaño mediano, con la desventaja de que no podíamos escoger las mejores nos conformamos con esas, estuve pensando que hubiera pasado si tuviera lombrices negras como carnada pero bueno para la otra llevaré algunas para reproducirlas y tener mejores resultados en la pesca. Después de una buena requemada y momento ameno no pudo faltar el chapuzón y la satisfacción de llegar a casa y comer unas ricas mojarritas doradas. Nos seguimos leyendo en otra ocasión y les dejo algunas tomas que realicé.

Presa de El Cuitzillo, Michoacán en Carácuaro.

Buscando un buen lugar para tirar la cuerda.

Árboles secos bajo el agua.

Nuyo tirando la cuerda desde una excelente posición.