Hay personas que todavía viven sin energía eléctrica y no habitan en alguna comunidad alejada del municipio, sino en la periferia de Coyuca.
COYUCA DE CATALÁN, GRO. A pesar de que ya estamos en el siglo XXI y que políticos y gobernantes se jactan de impulsar el desarrollo y el progreso de los pueblos, hay personas que todavía no les llega y es el caso de un par de ancianos que no viven en alguna comunidad alejada del municipio, sino en la periferia de la cabecera municipal.
Se trata de Octaviano García Palacios y de Antonia Palacios Ríos, ambos de 75 años de edad, quienes viven en una casa de lámina a un costado del puente de San Pedro Cuirio y que llevan 17 años sin conocer la electricidad porque no tienen dinero para pagar su instalación y mucho menos los recibos.
Octaviano García Palacios, quien es originario de San José de la Quesería, de este mismo municipio, comentó que una buena parte de su vida la hizo en Veracruz, lugar de donde es su primera esposa y con la cual procrearon cuatro hijos.
Sin embargo, desde hace años que ya no vive con la familia y por ende los hijos no lo visitan o apoyan económicamente y hace años decidió hacer pareja con Antonia, quien es originaria de Oaxaca y con quien ya no procrearon hijos porque se juntaron ya grandes.
Otro de los factores de su pobreza es que no tiene oficio y se dedicaba a las labores de jornalero en el campo o en lo que fuera o bien, tejer sillas, pero debido a su edad y a la falta de empleo, se ve en verdaderos problemas para la alimentación de ambos.
La casa en donde habita, o más bien el terreno, se lo donaron los ejidatarios, aunque un vecino ha intentado quitárselo, pero tiene el documento en donde los ejidatarios le cedieron el espacio, en el cual construyó una casa de “bajareque” o sea, a base de palos, lodo y láminas de cartón.
Hace poco, cuando se construyó el nuevo puente del mencionado río y que se hizo una desviación para que pasaran los vehículos, y como los mismos pasaban al pie de su terreno, permitió que algunas personas se percataran de su situación y le empezaron a llevar alimentos, pero otros lo apoyaron con tabique y cemento que le permitió hacer dos cuartos.
Pero en los mismos no vive porque les falta el techo, 3 puertas y dos ventanas, pero también requiere de láminas metálicas porque las que tienen ya no sirven.
Otra de sus necesidades, es solicitar que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) realice una obra social y los apoye para que les ponga la electricidad porque llevan 17 años viviendo en penumbras, al estarse alumbrando con lámparas de petróleo, como se vivía hace muchos años. De donde están los cables de electricidad a dicho domicilio hay unos cien metros de distancia.
Otra de sus necesidades es que a través de los DIF´s o instituciones altruistas les hicieran llegar despensas porque tienen problemas para alimentarse, una vez que nadie los apoya o sus familias, hacerse cargo de ellos.
A las autoridades les pide apoyarlos con un proyecto en donde pudiera desenvolverse tejiendo sillas o sillones, que es el único oficio que aprendió o en última instancia darle un empleo para que se ayude en el sustento de él y de su pareja.
Se quejó de los políticos, de quienes dijo le han solicitado su voto y aunque en los últimos años lo hizo por el PRD, en nada se ha beneficiado o al menos recibir apoyo por parte de sus dirigentes.
Finalmente, hizo el llamado para que se le apoye, básicamente en un proyecto porque a pesar de tener 75 años, considera que todavía puede trabajar, aunque hay varias cosas que están fuera de su alcance como es el no tener luz y empleo, sentenció.
Se trata de Octaviano García Palacios y de Antonia Palacios Ríos, ambos de 75 años de edad, quienes viven en una casa de lámina a un costado del puente de San Pedro Cuirio y que llevan 17 años sin conocer la electricidad porque no tienen dinero para pagar su instalación y mucho menos los recibos.
Octaviano García Palacios, quien es originario de San José de la Quesería, de este mismo municipio, comentó que una buena parte de su vida la hizo en Veracruz, lugar de donde es su primera esposa y con la cual procrearon cuatro hijos.
Sin embargo, desde hace años que ya no vive con la familia y por ende los hijos no lo visitan o apoyan económicamente y hace años decidió hacer pareja con Antonia, quien es originaria de Oaxaca y con quien ya no procrearon hijos porque se juntaron ya grandes.
Otro de los factores de su pobreza es que no tiene oficio y se dedicaba a las labores de jornalero en el campo o en lo que fuera o bien, tejer sillas, pero debido a su edad y a la falta de empleo, se ve en verdaderos problemas para la alimentación de ambos.
La casa en donde habita, o más bien el terreno, se lo donaron los ejidatarios, aunque un vecino ha intentado quitárselo, pero tiene el documento en donde los ejidatarios le cedieron el espacio, en el cual construyó una casa de “bajareque” o sea, a base de palos, lodo y láminas de cartón.
Hace poco, cuando se construyó el nuevo puente del mencionado río y que se hizo una desviación para que pasaran los vehículos, y como los mismos pasaban al pie de su terreno, permitió que algunas personas se percataran de su situación y le empezaron a llevar alimentos, pero otros lo apoyaron con tabique y cemento que le permitió hacer dos cuartos.
Pero en los mismos no vive porque les falta el techo, 3 puertas y dos ventanas, pero también requiere de láminas metálicas porque las que tienen ya no sirven.
Otra de sus necesidades, es solicitar que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) realice una obra social y los apoye para que les ponga la electricidad porque llevan 17 años viviendo en penumbras, al estarse alumbrando con lámparas de petróleo, como se vivía hace muchos años. De donde están los cables de electricidad a dicho domicilio hay unos cien metros de distancia.
Otra de sus necesidades es que a través de los DIF´s o instituciones altruistas les hicieran llegar despensas porque tienen problemas para alimentarse, una vez que nadie los apoya o sus familias, hacerse cargo de ellos.
A las autoridades les pide apoyarlos con un proyecto en donde pudiera desenvolverse tejiendo sillas o sillones, que es el único oficio que aprendió o en última instancia darle un empleo para que se ayude en el sustento de él y de su pareja.
Se quejó de los políticos, de quienes dijo le han solicitado su voto y aunque en los últimos años lo hizo por el PRD, en nada se ha beneficiado o al menos recibir apoyo por parte de sus dirigentes.
Finalmente, hizo el llamado para que se le apoye, básicamente en un proyecto porque a pesar de tener 75 años, considera que todavía puede trabajar, aunque hay varias cosas que están fuera de su alcance como es el no tener luz y empleo, sentenció.
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